Me hacen feliz los detalles más mínimos, los que parecen menos importantes; también es verdad que soy sensible a los detalles, a los malos también, muy sensible.
Me gusta la verdad cruda, como es, sin disculpas.
Me encanta encontrar la belleza en todo, y me parece muy importante la belleza que refleja el alma.
Me gusta ser amada, porque amo mucho.
A todo lo que me defrauda doy siempre, de nuevo, oportunidad; aunque no siempre son buenas las segundas partes.
Soy agradecida, y me gusta valorar todo lo que me dan.
Procuro comprender y apoyar al que siento que me necesita. Suelo ponerme en el lugar del otro, e imaginarme que hubiera hecho yo en esos casos.
No suelo hacer caso a los consejos, me equivoco, y con ello voy aprendiendo; pero no rechazo que me los den.
Me doy entera, enseguida abro el corazón al resto; después suelo pagar las consecuencias, pero todo pasa.
Hasta ahora, he tenido la suerte de no perder la sonrisa, a pesar de todo.
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